Mucho se habla de programa para bajar de peso en Internet, revistas y en televisión, todo el mundo da consejos y cree ser experto en alimentación sana.
Desde luego, no todas las opiniones que podemos escuchar son saludables. Muchas veces queremos conseguir resultados inmediatos y a sí descuidamos nuestra salud, siguiendo dietas para perder peso muy rápida, pero peligrosas.
Lo más importante si quieres seguir una dieta rápida para perder peso es que tengas un control médico constante de modo que no pongas en riesgo tu salud. Muchos especialistas ofrecen alternativas rápidas que pueden ayudarte a alcanzar resultados en momentos específicos pero las dietas de este tipo no pueden seguirse por mucho tiempo.
Por eso, lo más adecuado es realizar los cambios de hábitos necesarios para perder peso y mantenerlo en el tiempo naturalmente.
Un programa que vi que muchas personas lo están usando es el programa desintegrador de grasa, el cual usa alimentos naturales en la dieta y se concentra en cambiar los hábitos y mantener saludable en el tiempo.
Así que a continuación te doy algunas pautas para poder elegir una buena dieta que en verdad te mejore la salud.
En realidad, no debes eliminar las grasas y los carbohidratos.
La base para un menú saludable es no eliminar ningún grupo de alimentos, sino combinarlos adecuadamente y hacer elecciones correctas. Las grasas y los hidratos de carbono, que normalmente son bastante mal vistas para perder peso, son esenciales para el organismo pero no todos son buenos.
Es común pensar que el pan o la grasa engordan porque normalmente no hacemos elecciones saludables.
No todas las grasas son malas, nuestro cuerpo necesita grasa para poder obtener energía para el dia a dia. La cuestión es que debes saber elegir las grasas correctas “saludables”
El azúcar refinado es mejor eliminarlo si decides perder peso.
El azúcar refinado y los edulcorantes no aportan ningún tipo de nutriente, el primero aporta calorías vacías y aunque los endulzantes artificiales no, ambos producen un efecto nefasto para el organismo.
El proceso para asimilar los nutrientes que supuestamente están ingresando se inicia al sentir el sabor dulce, se libera insulina y comienzan a trabajar los órganos, pero ni el azúcar ni el edulcorante aportan nada, por lo que el proceso se inicia sin razón.
En lugar de recurrir a esta clase de productos, se puede optar por miel o azúcar integral. También existen algunas opciones saludables como la miel de cebada o de caña. En caso de querer un endulzante sin calorías en una dieta para perder peso, podemos recurrir a la stevia.
Las harinas y cereales deben ser integrales.
Las harinas y cereales deben ser integrales porque aportan más fibra, producen un efecto de saciedad más rápidamente y nos mantienen llenos por más tiempo. En cambio, los productos refinados son de absorción rápida y al cabo de 2 o 3 horas volveremos a sentir la necesidad de consumir estos alimentos.
Cuando este ciclo es constante, la sensación de hambre nos persigue cada poco tiempo y hacemos trabajar excesivamente al páncreas y al hígado.
El consumo de grasas saturadas debe ser muy bien controlado.
Las grasas saturadas se encuentran principalmente en productos de origen animal. La carne roja y los lácteos son muy ricos en grasas que en cantidad son dañinas para el organismo.
El consumo de carne debe ser reducido a una o dos veces por semana, complementando con pescado y pollo. Los lácteos deben ser controlados y no superar nunca el medio litro por día.
Muchos dicen que necesitas las proteínas de los productos animales, pero…
Normalmente se cree que las dietas bajas en productos animales (principalmente proteínas) son poco saludables pero la realidad es que existen una gran variedad de productos capaces de nutrirnos adecuadamente.
Algunos de ellos, como las algas y las semillas, son excelentes alimentos para perder peso. Por eso, es importante conocer otras opciones y darnos cuenta que es posible tener una vida más sana sin descuidar la nutrición.
Los vegetales deben estar en todas las dietas.
Los vegetales deben estar presentes en todas las comidas. Las frutas principalmente en ayunas y por la mañana y las ensaladas frescas y coloridas antes de cada comida importante. De esta forma podremos incorporar todos los nutrientes y perder peso fácilmente.
Conclusión
Estos son algunos consejos básicos que pueden ayudarnos a repensar nuestra alimentación. Incluso las personas que no se encuentran a dieta deben tenerlos en cuenta para una vida más sana.
Seguir un programa para bajar de peso saludable puede parecer difícil pero sólo se trata de ser conscientes de lo que comemos y despertar a un nuevo mundo de sabores.
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